XVI


"Ojala pudiera hacer versos de amor
de esos en que jadea la lectora
con voluptuosas noches de pasión
diciendo el gran placer que se atesora.

Pero no habrá mañana , día, otrora,
en que a sabiendas te mienta el corazón
sembrando margaritas que no afloran
más que en las aguas muertas del jarrón.

Mis versos son mugrientos , no decoran
no sirven para cuadro en tu salón
mas rimas tan sencillas sin demora
se hacer de amor, pasión y corazón.

Que fácil es así, doy cuenta ahora
rimar ya piel con miel y con fruición
casar cielo con pelo, y en la alcoba
poner cuerpo con terso a la fricción.

¡Donde he estado metido tanto tiempo!,
qué bien rima "te quiero" en tu colchón
poniendo que tu labio es caramelo
y azúcar mi camelo y rosa tu rubor

Dios mío tanto tiempo, yo tan ciego
si pongo "ojos" ya tengo tu atención,
y si liviano escribo "terciopelo"
igual consigo, lectora, una ovación.

Y mas.. ya sigo
he encontrado el camino
poniendo "dulce cuello" en la oración
y digo que tus pechos son dos brillos
que hacen salir el sol del pantalón.

Espera , pero creo que me ido,
que me ha arrastrado tanta satisfacción
que de sublime me he corrido a lo sencillo
y de lo tibio me fui a calefacción.

Como tu ombligo no encuentro el punto medio,
-y asi lo arreglo volviendo por la voz-
y voy diciendo "suspiro" al recorrerlo
"susurro",te "murmuro" y digo "vos".

Y al final es sencillo, más cansado
esto de hacer versos como el amor
pues de "tu dulce" me encuentro empalagado
poeta enamorado, diabetes corazón."

Rezgo Reis

Pasar hoja--->

Cap.I Cap.III